domingo, 21 de octubre de 2012

Plan de Vida


Somos los jefes de nuestro proyecto de vida. El universo nos pone los elementos a trabajar. Nuestros recursos son nuestras habilidades.

Preguntarse: “¿Qué tengo, qué soy, qué haría gratis porque es mi naturaleza su expresión?”

Pero los elementos con los que cuentas no son únicamente eso que has traído en tu genética. Se conforman nuevos elementos derivados de las situaciones que has vivido y el modo en que han impactado en tu naturaleza.

Entonces, un día, tú eres todo eso unido, además de los imputs puntuales que vas viviendo, y lo que éstos van ocasionando en ti.

Estos imputs pueden ser, por ejemplo:
-          Amor: Expresado puramente (porque es puro, es unión).
-          Ira: Descodificado, neutraliza su daño y expresa al objeto proveniente.
-          Dolor: Descodificado, expresa la naturaleza sufrimiento.

Entonces, ¿qué eres en cada momento? ¿Qué solución tienes AHORA, y quién eres…
-en ti mismo?
-frente a “esa” situación?

Todo esto es el potencial para actuar en tu mundo, trabajando sobre los elementos que lo componen. ¡Expresarlo neutraliza!

Toda aquella emoción que surge de la dualidad, al expresarla, tiende a neutralizarse.

La neutralización es el objetivo. En el objetivo de vida está la base de la neutralización de las dualidades para romper el traje humano que nos mantiene inmersos en la inconsciencia de Quienes-Somos.

Cuando esta neutralización ocurre (primero por partes, y un día será general), sales de la ilusión del traje humano, del personaje. Y, aunque lo sigues representando, sólo vivirás el amor, porque lo estarás dirigiendo, no desde el ego (la naturaleza del humano), sino desde el Ser que lo anima. Entonces, podrás adentrarte en este humano, siempre que sea expresión de amor, y dirigirlo desde fuera mediante el trabajo de fusión de dos opuestos en el concepto de dualidad (ej.: envida, ira, miedo, adicciones, soberbia, etc.).

Muchas de esas cosas parecerían placer, pero todo placer que no deriva del Amor puro depende de algo externo, y de nuevo vuelve a ser la expresión de una dualidad. Es la búsqueda, fuera, de lo que no puedes expresar dentro.

Así que,
- ¿quién eres ahora mismo?, ¿cuáles son los elementos de tu vida…
-unificadores?
-duales?, 
- ¿con qué elementos –emociones- cuentas, para trabajar con ellos? 

-          Y… ¿qué rompe la barrera del sueño del personaje y logra salir en consciencia para permitirle Ser, guiarlo, y disfrutar en él cada vez que tiene vivencias unificadas?

Este es tu papel en esta vida.*
 

*Pero siendo siempre coherente en vuestra naturaleza y usando sólo la energía disponible. Nunca entregando energía para conseguir algo de otro.
Esto es más que liberarse de la dualidad, es ceder al otro la llama de la liberación.

Así que, ya que lo has hecho, recoge ese depósito, vuélvelo a ti, complétate y sigue adelante con tu misión.
 

Graciela Bárbulo
19/10/12

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